Ganar fuerza desde la serenidad

Durante mi trayectoria como atleta, los estiramientos eran considerados una parte esencial para prevenir lesiones en mi práctica de atletismo, tal y como me aconsejaba mi entrenador.

A pesar de haber seguido sus consejos de manera constante y diaria, puedo afirmar que los estiramientos no contribuyeron a prevenir lesiones. De hecho, parecían fomentar el desajuste mecánico y la inestabilidad articular.

En una de mis sesiones de yoga, mientras realizaba una asana, experimenté una sensación de desgarro en las fibras del aductor longus. La frustración fue inmensa, ya que a pesar de estar en reposo y estirando, volví a lesionarme.

Fue años más tarde, gracias a los estudios de biomecánica, cuando comprendí que estaba yendo en contra de la función muscular. En lugar de fortalecer los músculos con los estiramientos pasivos, estaba generando estrés y debilitamiento.

Tras 12 años de práctica de diversos estilos de yoga y de abandonar completamente la disciplina, la idea de cambiar patrones mentales en el mundo del yoga y del deporte me persiguió hasta tener el valor y la fuerza para llevarlo a cabo.

Isoyoga es el resultado de mi esfuerzo por aplicar la biomecánica, todos mis conocimientos y experiencia para modificar procedimientos y cambiar el enfoque físico: centrarse en mejorar la capacidad contráctil muscular en vez de querer siempre estirar para quitar la tensión ya que esta aparece como compensación y protección ante la debilidad muscular.